Independiente empezó perdiendo en la difícil altura de Bogotá, pero fue a buscarlo y lo empató. Se trae un punto que por como venía el partido, recontra vale, y más teniendo en cuenta que D.Lara perdió en Brasil y deberá venir a ganar o ganar en Avellaneda.
El Rey de Copas, que venía golpeado por lo sucedido en la Superliga, se jugaba una parada más que complicada. Le costó y mucho hacer pie y meterse en el partido. La altura parecía afectar a un equipo que esperaba demasiado y muy atrás.
Por esto último, cuando recuperaba, le costaba llevar la pelota con control y dominarla. El equipo estaba muy largo, si bien no sufría demasiado porque la defensa se mantenía ordenada, ayudada por un Torito Rodríguez de buen partido y un Nico Domingo que le daba equilibrio. Pero sobre todo, el rival demostraba ciertas limitaciones que le facilitaban la tarea a los de Avellaneda.
Una vez pasada la primera media hora del encuentro, el equipo se asentó y empezó, de a poco, a animarse y controlar la pelota. Benítez parecía muy solo comandando los ataques, ya que los extremos estaban más bien como volantes, muy avocados a lo defensivo, y Gigliotti estaba perdido.
Aún así, con más empuje que ideas, tuvo sus chances a traves de alguna pelota parada, y sobre el final de la primera parte, Figal increíblemente se perdió un gol de cabeza llegando solo frente al muy buen arquero Fariñez.
En la segunda parte, Millonarios salió más decidido. Independiente seguía con ese planteo mezquino que no gustaba, y en el que no se sentía cómodo. Era terreno desconocido, y esa incertidumbre fue aprovechada por Millonarios que tomo posesión y poscición en campo rival, pero sin generarle mucho peligro al arco de Campaña.
Pero en una de esas llego la mano de Amorebieta, discutible pero mano al fin, que Cadavid cambió sin problemas por gol. Y encima Millonarios aprovechaba el envión y siguió yendo. El partido se partió y era de un ida y vuelta constante.
Cuando toleró esos cinco minutos post-gol, Independiente se soltó y empezó a mostrar la buena cara de este equipo. Construyendo en base al fútbol, tocaba y se arrimaba. Gigliotti, de repente, se cortó rumbo al gol, y después de una larga carrera con una gran pausa, fusiló al arquero para poner el empate clave.
Si bien el punto le servía al rojo, Millonarios estaba mal, y eso era bien aprovechado. Braian Romero ponía el segundo, pero fue mal anulado por offside. Lo tuvo Benítez, también Gigliotti. Independiente pudo haberlo ganado, pero este punto es válido y tan solo está a un paso de pasar de ronda en esta Copa Libertadores.
Síntesis:
Millonarios (1): Faríñez; Palacios, Figueroa, Cadavid, Banguero; De Los Santos, Duque, Rojas; Valencia, Salazar, Del Valle.
Independiente (1): Campaña; FigaL, Franco, Amorebieta, Silva; Domingo, Rodríguez; B.Romero, M.Benítez, Veron; Gigliotti.
Goles: 57´ Cadavib, de penal (M) 75´ Gigliotti (I)
Estadio: Nemesio Camacho (El Campín)
Árbitro: Roberto Tobar (6)
Posiciones Grupo 7:
Corinthians - 10
Independiente - 7
Dep. Lara - 6
Millonarios - 5
FOTO: Infobae
El Rey de Copas, que venía golpeado por lo sucedido en la Superliga, se jugaba una parada más que complicada. Le costó y mucho hacer pie y meterse en el partido. La altura parecía afectar a un equipo que esperaba demasiado y muy atrás.
Por esto último, cuando recuperaba, le costaba llevar la pelota con control y dominarla. El equipo estaba muy largo, si bien no sufría demasiado porque la defensa se mantenía ordenada, ayudada por un Torito Rodríguez de buen partido y un Nico Domingo que le daba equilibrio. Pero sobre todo, el rival demostraba ciertas limitaciones que le facilitaban la tarea a los de Avellaneda.
Una vez pasada la primera media hora del encuentro, el equipo se asentó y empezó, de a poco, a animarse y controlar la pelota. Benítez parecía muy solo comandando los ataques, ya que los extremos estaban más bien como volantes, muy avocados a lo defensivo, y Gigliotti estaba perdido.
Aún así, con más empuje que ideas, tuvo sus chances a traves de alguna pelota parada, y sobre el final de la primera parte, Figal increíblemente se perdió un gol de cabeza llegando solo frente al muy buen arquero Fariñez.
En la segunda parte, Millonarios salió más decidido. Independiente seguía con ese planteo mezquino que no gustaba, y en el que no se sentía cómodo. Era terreno desconocido, y esa incertidumbre fue aprovechada por Millonarios que tomo posesión y poscición en campo rival, pero sin generarle mucho peligro al arco de Campaña.
Pero en una de esas llego la mano de Amorebieta, discutible pero mano al fin, que Cadavid cambió sin problemas por gol. Y encima Millonarios aprovechaba el envión y siguió yendo. El partido se partió y era de un ida y vuelta constante.
Cuando toleró esos cinco minutos post-gol, Independiente se soltó y empezó a mostrar la buena cara de este equipo. Construyendo en base al fútbol, tocaba y se arrimaba. Gigliotti, de repente, se cortó rumbo al gol, y después de una larga carrera con una gran pausa, fusiló al arquero para poner el empate clave.
Si bien el punto le servía al rojo, Millonarios estaba mal, y eso era bien aprovechado. Braian Romero ponía el segundo, pero fue mal anulado por offside. Lo tuvo Benítez, también Gigliotti. Independiente pudo haberlo ganado, pero este punto es válido y tan solo está a un paso de pasar de ronda en esta Copa Libertadores.
Síntesis:
Millonarios (1): Faríñez; Palacios, Figueroa, Cadavid, Banguero; De Los Santos, Duque, Rojas; Valencia, Salazar, Del Valle.
Independiente (1): Campaña; FigaL, Franco, Amorebieta, Silva; Domingo, Rodríguez; B.Romero, M.Benítez, Veron; Gigliotti.
Goles: 57´ Cadavib, de penal (M) 75´ Gigliotti (I)
Estadio: Nemesio Camacho (El Campín)
Árbitro: Roberto Tobar (6)
Posiciones Grupo 7:
Corinthians - 10
Independiente - 7
Dep. Lara - 6
Millonarios - 5
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